jueves, diciembre 14, 2006

Me estresa estresarme, pero, si no ando estresado, me estresa la inactividad. Muevo cien cosas a la vez, noventa y nueve inútiles y una absurda. Sin embargo, todo encaja. ¿Será que lo útil es algo inútil disfrazado? Porque, ¿qué es la vida sino un cúmulo de inutilidades que nos conducen al gran absurdo? Tanto afán, tanto afán... Me veis aquí, nos vemos aquí, de un lado a otro, siempre jodidos, siempre contentos.
Nada, lo dejo, que últimamente la cosa mística anda fatal (y la otra, también)